El año llega a su fin y como es lógico y normal es hora de análisis, resúmenes y balances. Y si pienso en lo que ha sido este año 2015 en lo deportivo, hay poco de que hablar de Fórmula 1 que no se haya dicho ya.
Sin embargo en nuestro caso y en cierto modo en el mío particular, hay algo que sí marca de manera especial esta temporada y son los éxitos de algunos de nuestros pilotos, de tres victorias (mas una) que marcarán un antes y un después para quienes las consiguieron.
Obviamente estoy hablando de Miguel Molina, Alex Riberas y Alex Palou, mas el añadido de Daniel Juncadella. Del éxito y mérito de Molina ya hice una entrada especial para él, pero de los dos Alex es hora de darles el reconocimiento que se merecen.
Y es que ganar carreras es algo muy difícil, mucho mas de lo que parece visto desde fuera, desde la televisión o el “live timing”. He tenido la suerte personal y profesional de estar con ellos en muchas de ellas, de vivir de cerca las dificultades que comporta estar en campeonatos de alto nivel competitivo y de entender de primera mano cuan difícil es conseguir ser el mejor de un pelotón, aunque sea solo por una carrera.
En el caso de Miguel, cinco años de piloto oficial Audi le permitieron demostrar su calidad y su velocidad, de lo contrario no habría renovado año tras año, pero hizo falta casi culminar el sexto para conseguir la ansiada victoria, para imponerse a un pelotón de 24 coches todos oficiales como el suyo. Y casi tanta dificultad tuvo eso como la tuvo el empeño de Alex Riberas en las carreras de la Porsche Cup y Supercup.
Estar en ambos campeonatos, uno por ser compañero de viaje del DTM y el otro por formar parte de mi trabajo en Movistar Plus mientras pude ir, me permitieron vivir de primera mano eso que he dicho antes, esa manera de ver las carreras y sus dificultades desde dentro. Y Alex se encontró con los mismos inconvenientes que Miguel: es muy difícil ser el mejor, aunque sea solo alguna vez, en un pelotón de Porsche que en ocasiones sobrepasaban la treintena.
De un primer año en el que cogió experiencia a un segundo en el que empezó a asomarse a las primeras posiciones y en el que ya cayeron la primera pole y el primer pódium y un tercero en el que por fin llegó la ansiada victoria, el camino ha sido duro. Y especialmente este año, en el que no solo no era miembro del “Porsche Junior Team” sino que tenía a uno de sus componentes a su lado, lo que siempre es una dificultad añadida, por cuanto es un coche oficial. A pesar de momentos brillantes y de otros que no lo fueron tanto, la victoria parecía esquiva aunque al final la consiguió de la mejor manera posible, bajo la lluvia torrencial de Austin, en las peores condiciones, pero también en una de esas ocasiones en que las circunstancias igualan las mecánicas y el piloto puede marcar la diferencia.
Miguel y Alex han tardado en conseguir la victoria bastante mas de lo que ha tardado el otro Alex, Palou. Su primera victoria llegó “in extremis” a final de temporada, pero hay que decir que las dificultades para él también fueron muchas, como lo fueron para el equipo de Adrián Campos, quien asumió el riesgo de entrar en GP3 para poder ofrecerle un buen volante en un campeonato de relevancia a su piloto.
Y puedo certificar de primera mano, porque estaba allí, cuan difíciles fueron los comienzos, cuantos problemas inesperados se encontraron unos y otros y cuantas carreras se perdieron casi antes de empezarlas. El mérito de este éxito de final de temporada, de esta primera victoria, es más el éxito de la perseverancia y de no dejarse batir por el desánimo, porque os aseguro que hubo momentos en que eso hubiera sido lo más lógico. Pero ni Alex ni ninguno de los miembros del Campos Racing perdió la fe en sus posibilidades y así consiguieron algo inédito: nunca antes un equipo y un piloto español habían ganado una carrera de GP3 y ellos inauguraron un marcador que seguro que el año próximo ampliarán.
Y aunque no fuera en una carrera oficial, la victoria de Daniel Juncadella en la Stars & Cars de Mercedes también hay que valorarla en su justa medida. Ahí es nada con ese pódium en compañía de Pascal Wehrlein y Lewis Hamilton en los escalones inferiores. Con Daniel también he tenido una larga trayectoria de buenas relaciones aunque él este en “la competencia”, pero eso no me impide reconocer el mérito de su éxito, ya que al al igual que con Miguel o los dos Alex, a menudo comparto sus vicisitudes como lo hice en su día con Roberto Merhi.
Y también un aplauso para Alex Toril, metido en la Porsche Cup, ganador de la clasificación de rookies y que acabó segundo absoluto en Austria y felicitar a Ander Vilariño por sus triunfos en la NASCAR Europa. A todos ellos un fuerte abrazo y a los cuatro ganadores (Miguel, los dos Alex y Daniel) decirles que son muy malos amigos: después de años y carreras compartiendo penas, se han decidido a ganar carreras cuando yo no he estado. Voy a coger fama de gafe…
Amén, y que 2016 nos traiga más victorias. Yo creo que llegarán, talento hay.
Un gran año, ciertamente, con un buen número de alegrías.
En mi caso, si tengo que elegir, me quedo con las 12h de Sebring, porque verdaderamente vibré viéndolas. Ese doble triunfo de Antonio y Alex, con gran importancia de ambos pilotos en el resultado, y con el toque épico en el caso de Alex, fue indescriptible.
Complementando lo que comentas, la verdad es que también hemos tenido un buen número de alegrías en turismos. Gran año de Oriola y de alguien que parecía retirado, Gené. A ver qué le depara el futuro a Rosell después de dos victorias consecutivas en la León, además de la victoria en su debut en las TCR con Volkswagen. Y mucho ojo con Dani si decide continuar con resistencia, porque sus actuaciones invitan a soñar.
Y sobre Dani, yo creo que lo que ha conseguido en el showevent es importantísimo. No por el trofeo, sino contra quién lo ha hecho, y delante de la gente que lo ha hecho. Apostaría porque el año que viene vamos a ver a Dani con un mejor trato dentro de Mercedes
Evidentemente había mas pilotos con éxitos, yo me he centrado en aquellos con los que tengo un contacto más próximo, pero es cierto que García, Jordi y lo Oriola están haciendo un gran trabajo en los turismos.
Yo me quedo, con la Gran Victoria que supone poder leer este Blog, con cada «Pedacito de una vida dedicada al motor»
PD: Suena a titulo de Libro…
Mil Gracias Carlos.
Gracias José Antonio.
Tranquilo, no tienes ninguna posibilidad, pero ninguna de quitarle el titulo de gafe máximo, al hombre que susurraba a las cenizas…
Muy buena entrada Carlos. Un par de paellas mas para coger fuerzas, y el año que viene estás en las victorias que vendrán de todos ellos.
¡Ja, ja! Gracias, lo de la paella fue una buena medicina.
Buenas Carlos,
Pones que Álex no es miembro del Porsche Junior Team, ¿pero sigue estando bajo nómina de Porsche?
Saludos,
Pedro
No, no está en «nómina» como dices tu, aunque en nómina en el sentido crematístico no lo ha estado nunca.
Muy oportuno lo que comentas, creo yo que tras vencer a nada menos que Hamilton y un grandísimo piloto como lo es Wehrlein hará que Mercedes le dé un mejor trato a Dani para la próxima temporada.
Espero que Dani sustituya a Pascal en HWA, y Ocon pase a Muecke. Y Claro, Pascal a F1, que la GP2 mata pilotos.
Esta victoria refleja su madurez y probablemente el mejor estado de forma de Juncadella. Está en un excelente momento, más de lo que se ve desde afuera, tal vez los GT contribuyeron en ello.
Un saludo.
Ojalá Dani esté el año próximo en otro equipo que no sea Mücke. Allí ya ha hecho todo lo que podía hacer, es hora de que le dejen dar un paso adelante.